El cantante, compositor y pianista británico Elton John reveló que no pudo ver el espectáculo para el que compuso la música debido a que perdió la vista.
En su intervención en la gala de “El diablo viste de Prada: el musical”, el músico dijo: “Perdí la vista y no pude ver la presentación, pero disfruté escuchándola”.
El espectáculo, celebrado en el West End de Londres –la zona donde se concentra la mayoría de los teatros de la ciudad- celebró el domingo por la noche una gala benéfica para la Fundación Elton John contra el SIDA.
El evento, al que acudieron numerosas estrellas del espectáculo, atrajo a famosos como Anna Wintour, Lily Collins y Donatella Versace.
La estrella del pop, de 77 años, viene sufriendo problemas de visión desde que contrajo en julio una infección en el ojo derecho.
Si bien no está claro qué condición padece, John declaró en noviembre al programa Good Morning America de la cadena ABC News que contrajo la infección en el sur de Francia.
Esta infección lo dejó ciego en el ojo derecho y con una “visión limitada” en su ojo izquierdo.
“Hace cuatro meses que no puedo ver, y mi ojo izquierdo no es el mejor”, señaló entonces.
“Me estoy curando, pero es un proceso extremadamente lento y pasará algún tiempo antes de que la vista vuelva al ojo impactado”, escribió en un comunicado compartido en las redes sociales.
En declaraciones a la BBC en la alfombra roja, Wintour dijo que estaba deseando apoyar a Elton y describió el musical como “entretenido”.
Cuando se le preguntó si la película y el musical son representativos de la industria de la moda, la redactora en jefe de Vogue respondió que eso era algo que debía decidir el público.
“Corresponde al público y a la gente con la que trabajo decidir si hay similitudes entre Miranda Priestly y yo”, añadió.
A menudo se ha rumoreado que el personaje de Priestly está basado vagamente en Wintour.
Cambios en la industria de la moda
“El diablo viste de Prada” (también traducido para hispanoamérica como “El diablo se viste a la moda”) cuenta la historia de Andy, una joven periodista con aspiraciones que se convierte en ayudante de una de las editoras de revistas de moda más despiadadas de Nueva York, Miranda Priestly.
La diseñadora de moda estadounidense Betsey Johnson comentó que “todo el mundo en la industria de la moda adora la película”.
La diseñadora, de 82 años, dijo que tuvo la “suerte” de pasar por la industria sin tener que “entrar en el juego”.
“Cuando vi la película por primera vez, pensé que menos mal que me perdí todo eso, porque no me gustaría haberlo vivido”.