El Partido Libertad y Refundación (Libre) endureció su oposición al Consejo Nacional Electoral (CNE), con el consejero Marlon Ochoa negándose a firmar la declaratoria final de resultados, argumentando que su firma "le pertenece al pueblo hondureño" y no validará acciones de las consejeras Cossette López y presidenta Ana Paola Hall. Ochoa, ovacionado por militantes, denunció manipulación en el orden de 430 actas del Distrito Central, donde Libre lidera 241 frente a 183 del PN.[conversation_history]
Postura Firme de Dirigentes Liberistas
La excandidata presidencial Rixi Moncada respaldó al alcalde Jorge Aldana, llamando a la militancia y ciudadanía a una "vigilia y acción" ante irregularidades en maletas electorales que priorizan triunfos nacionalistas. El expresidente Manuel Zelaya Rosales rechazó categóricamente los resultados, anunciando no reconocimiento de la declaratoria del CNE, en un contexto de recursos ante el TJE por recuentos especiales impulsados por Marco Tulio Medina del Partido Liberal.[conversation_history]
Denuncias de Irregularidades Internas y Externas
Ochoa y Fabiola Rosa Vigil (PN) acusan alteraciones en sumatorias de votos, como un acta donde César Rivera Callejas sumó 50 votos inexplicables, desplazándola por 400. Estas revelaciones internas del PN alimentan sospechas de parcialidad en el CNE, sumadas a amenazas de "brazos caídos" policiales por impagos y destitución de Leandro Osorio en Seguridad.[conversation_history]
Tensiones en Transición Política Hondureña
Con plazo límite del 30 de diciembre, Libre exige contar todas las actas inconsistentes, voto por voto en 65 alcaldías y curules, afectando mayorías en el Congreso Nacional disputado por Marco Midence, Carlos Ledezma y Tomás Zambrano. Zelaya y Moncada posicionan a Libre como defensores de la voluntad popular en Tegucigalpa, ante capturas pandilleras en Cortés que distraen de la crisis electoral.
