Mudarse a otro país tiene consecuencias importantes para el que se muda y su familia. Sin embargo, suelen ignorarse aspectos legales y económicos que pueden tener impacto por el resto de la vida del migrante.
En este artículo veremos asuntos que deben considerarse para evitar problemas fruto de la ignorancia. Abarcan desde derechos civiles como doble nacionalidad o voto a aspectos económicos como impuestos, jubilaciones y mudanzas de regreso al país de origen.
1. Doble nacionalidad
Sólo en Estados Unidos en el año fiscal 2023 un total de 878,500 migrantes se convirtieron en ciudadanos estadounidenses. De los cinco países de origen más frecuente de los nuevos ciudadanos, tres son latinoamericanos: México, República Dominicana y Cuba.
Ello se debe a que es frecuente que, con el paso de los años, los migrantes soliciten la nacionalidad por naturalización en el país en el que viven, ya que les da mayor seguridad jurídica y derechos.
Sin embargo, antes de iniciar un proceso de naturalización conviene preguntarse si la doble nacionalidad es permitida por el país de origen y el país de acogida.
Por ejemplo, España es conocida por ser reacia a situaciones de doble nacionalidad, excepto con los países con los que expresamente tiene un tratado al respecto.
Aunque lo cierto es que, en la práctica, en el caso de los países latinoamericanos y Estados Unidos la tolera.
2. Transmisión de la nacionalidad a los hijos
En este punto pueden darse dos situaciones diferentes y ambas muy interesantes.
En primer lugar, hay que preguntarse si los hijos de un migrante que nacen fuera del país de origen de su padre o de su madre pueden adquirir la nacionalidad de ese progenitor. No siempre es posible.
Y, cuando esa posibilidad está abierta, pueden establecerse reglas que deben ser cumplidas.
Por ejemplo, que la inscripción en el consulado debe realizarse dentro de un determinado plazo o que cuando el niño o la niña llegan a determinada edad deben ratificar que desean conservar la nacionalidad de su padre o de su madre.
En segundo lugar, cuando un migrante adquiere la nacionalidad del país de acogida, en muchos casos será posible pasar dicha nacionalidad a los hijos menores de ese migrante.
Ese es el caso de Estados Unidos y de España, si bien las legislaciones de ambos países establecen requisitos como la convivencia con el progenitor que se naturaliza.