El provocativo humor de Lucho Miranda, el exitoso comediante chileno que ha hecho de su parálisis cerebral su mejor chiste

El provocativo humor de Lucho Miranda, el exitoso comediante chileno que ha hecho de su parálisis cerebral su mejor chiste

 Lucho Miranda

Luis Miranda -más conocido como Lucho Miranda- sufrió asfixia al nacer, lo que le provocó una parálisis cerebral. [Ramón Gómez]

"Me presento: soy Lucho Miranda, soy comediante y para los que no me conocen, no, no estoy borracho. Tengo una discapacidad que me hace parecer medio borracho, pero no. Aunque no tengo cómo demostrarlo porque no puedo caminar derecho".

Luis Alberto Miranda Espinosa se ríe de todo, sobre todo de él mismo y su condición.

Al nacer, sufrió una asfixia nasal de 8 minutos y una parálisis cerebral (específicamente una afección llamada tetraparesia) que lo dejó con un 70% de discapacidad física.

Sus cuatro extremidades fueron las más afectadas, generando rigidez en sus dos manos y dificultades para caminar.

Su humor es rápido, negro y provocativo. Irónico e irreverente.

"Estuve 8 minutos sin oxígeno. Eso es mucho si se considera que desde el minuto 4 uno empieza con el daño cerebral. Yo tuve el doble. Me aseguré".

"Lo tengo todo. Tengo amigos, tengo novia, los tengo a ustedes... lo tengo todo. Hasta que veo a un weón sacarse los mocos con los dedos y digo... ¡Ohhhhh, qué envidia más grande!"

2024 ha sido un gran año para el comediante chileno de 29 años, el año de su consagración se podría decir.Lucho Miranda junto a sus padres, Solercio Miranda y Mirta Espinosa.

Lucho Miranda junto a sus padres, Solercio Miranda y Mirta Espinosa, tras recibir los premios por su actuación en el Festival de Viña del Mar. [Ramón Gómez]

Comenzó con su gran actuación en febrero en el Festival de Viña del Mar, el escenario más importante de su país y del continente; y se conoronará a mediados de diciembre con un show en Argentina, su primera presentación fuera de Chile.

La “burbuja”

Lucho Miranda nació un 30 de enero de 1995 en Vicuña, la misma ciudad del norte de Chile donde nació la Premio Nobel de Literatura Gabriela Mistral.

En el colegio destacó por su buen desempeño y su energía, pero recuerda su niñez con cierta melancolía.

“A veces me sentía como en una burbuja. No me dejaban jugar a la pelota o salir y compartir con mis amigos. Hubo varios momentos en que no me gustó mucho mi infancia”, dice en conversación con BBC Mundo desde su casa en Santiago.

Ante esto, el humor se convirtió en su mejor aliado.

Miranda se paraba frente a sus amigos y decía “payas”, versos improvisados típicos de la cultura chilena.

“Eran payas simples… por ejemplo… ‘un diablo se cayó al agua, otro diablo lo levantó, mientras el otro diablo le decía: ‘¿cómo diablos se cayó?’”, explica entre risas.

Sus limitaciones físicas no lo acomplejaban y desde muy pequeño acudió a la Teletón, institución dedicada a la rehabilitación integral de los niños con discapacidad en Chile.

“Mis amigos alguna vez se burlaron de mí, me molestaron, pero nunca fue algo fuerte. Mi mamá les decía: ‘No se hace burla con eso, no se pueden hacer chistes’, pero lo estábamos pasando bien. Nunca me sentí ofendido porque un amigo dijera que no podía abrir mis manos”, añade.

A pesar de lo anterior, Miranda reconoce que le costó “aceptarse”.

“Hasta que me di cuenta de que no podía cambiar”, dice con una cuota de humor negro.

“En la pubertad tenía acné, se me empezó a caer el pelo, tenía las orejas grandes y más encima no podía abrir las manos. Pensaba: ‘¿Por qué todo mal?’. Pero después me empecé a querer a mí mismo”, señala.Lucho Miranda

"Nunca me sentí ofendido porque un amigo dijera que no podía abrir mis manos", dice Lucho Miranda. [Ramón Gómez]

Tras salir del colegio, decidió entrar a estudiar contabilidad impulsado por sus padres, Solercio Miranda y Mirta Espinosa.

Ejerció como contador por un tiempo en la municipalidad de Vicuña, pero estando allí se dio cuenta de que lo suyo no eran los números sino la comedia.

“No me sentía feliz… aunque era un trabajo remunerado y tenía solvencia económica, no quería eso”, recuerda.

Y así, en 2020, en plena pandemia de covid-19, decidió renunciar y dedicarse a lo que más le gustaba: hacer reír.

“Al principio fui cuestionado y hasta yo mismo me cuestioné la decisión… es que ¿a quién se le ocurre renunciar en plena pandemia? Sólo a mí…”, dice sonriendo.

Post a Comment (0)
Previous Post Next Post

{getMailchimp} $title={Stay Informed} $text={Subscribe to our mailing list to get the new updates.}